Ars Salutis como bioética reflexiva investiga la complejidad de los problemas de la bioética confrontada con los desarrollos de las últimas revoluciones científicas. Estas plantean desafíos inéditas hasta el presente. El conocimiento sobre el hombre y su mundo se va enriqueciendo cruzando las fronteras que van más allá de los campos antes considerados como “naturales” a los cuales una bioética reflexiva debe hacer frente desde un juego de racionalidades que van desde la epistemología de la ciencia hasta la hermenéutica de las ciencias del espíritu. Una bioética meditante que asume la Multi inter trans-disciplinariedad, complejidad y totalidad concreta se define como una práctica racional muy específica que pone en movimiento un saber, una experiencia y una competencia normativa en un contexto particular del accionar definido no sólo por el prefijo bio, sino por una acción de segundo orden que opera sobre las prácticas de primer orden por medio de la interpretación, explicación, comprensión. Sobre el ámbito de las bases biológicas y axiológicas de una racionalidad ética se amplía así el horizonte integrando diversas dimensiones que por la prudencialidad desciende desde los principios de las ciencias hasta los casos particulares en los que se pone en juego el dolor, el sufrimiento, la muerte. Un posible método reflexivo hermenéutico consistente en describir, narrar y prescribir pone en juego el amplio espectro de la sabiduría práctica ante situaciones límite. El método empleado es el fenomenológico hermenéutico. Esta investigación comprende dos parte: delimitar que es la bioética reflexiva y señalar el modo como el éthos de la vida, desde la autonomía quebrada, encuentra una respuesta responsable y un sentido al sufrimiento, al dolor y la muerte. Se ilustra este procedimiento con algunos casos concretos de vida.