El proyecto se inscribe en un contexto en el que se identifican de forma avanzada y en continuo crecimiento fenómenos contemporáneos tales como la crisis de los recursos fundamentales para la sostenibilidad de la vida colectiva y el medio ambiente que junto al déficit de la vivienda tanto en cantidad como en calidad, el desarrollo inequitativo y desigual tanto económico como social, la falta de una previa planificación y baja actuación por parte del estado, dejándonos como resultado viviendas en mal estado, con familias en peligro por las mismas repercusiones medioambientales y una segregación social económica y urbana