La contaminación acústica es un fenómeno que afecta las grandes urbes en el mundo y que con el tiempo ha ido aumentando. Puede llegar a ser un problema para las personas, puesto que su impacto puede dañar físicamente el oído y ocasionar problemas de audición en un momento de la vida en que todavía se es joven. Según un informe en el 2015 de la Organización Mundial de la Salud, la contaminación acústica es el segundo problema ambiental después de la polución y las personas sufren no solo daños en su oído, sino problemas con relación a otras partes del cuerpo y la mente. Una reacción al sonido es la “misofonía”, que corresponde a la fobia que sienten algunas personas hacia algunos sonidos que, para el resto de la gente, pueden pasar desapercibidos. A partir de estos dos temas se creó una historia mediante el cómic como contribución a conocimiento y toma de consciencia del ruido como factor de riesgo de enfermedades acústicas.