dc.description.abstract | Los seres humanos somos seres cambiantes y a la vez vamos evolucionando junto con los cambios del mundo, dentro de estos cambios esta el cambio en la percepción de la familia. La familia claramente hoy en día no es la misma de hace 60 años, es decir la de nuestros abuelos. Donde el eje central era el papá, la mujer criaba y se quedaba en casa con los niños. Hoy en día hay muchos casos, empezando por las parejas de mismo sexo, las cuales buscan formar una familia pero por razones físicas y anatómicas no pueden. Entonces es acá cuando deciden llenar ese vacío por medio de un mascota, pues hoy en día la publicidad y las marcas se han encargado de hacernos la idea de que las mascotas son como un hijo. Ahora bien, esto no es algo que hacen únicamente las parejas del mismo sexo, las heterosexuales también lo hacen pues su visión del futuro y del mundo están centradas en otras prioridades y un hijo puede llegar a perjudicar sus planes, mientras una mascota no pues no requiere de las mismas responsabilidades de un hijo.
Asimismo, el discurso de las marcas se ha encargado de hacerle la idea a las personas sobre la humanización de las mascotas mas veraz. Pues surgen distintos productos y servicios para las mismas, por ejemplo la camita, la casita, el colegio, la peluquería, la fiesta de cumpleaños, entre otras cosas. Algo que hace unos años no hubiera pasado jamás, pues si se le tenía un cariño especial a la mascota, era ese amigo fiel, pero no se le daba la prioridad de un hijo.
En conclusión, surge la necesidad de llegar de una nueva manera al público (millennial), pues la publicidad y el discurso necesitan una transformación frente a las nuevas necesidades del mundo. | spa |