La re-presentación pública de la memoria sobre los crímenes de guerra y lesa humanidad perpetrados en situaciones de excepcionalidad, es decir de la suspensión de los derechos y relegación del carácter humano, se ha convertido además de un propósito de quienes pretenden reivindicar a las víctimas del conflicto colombiano, en un escenario de lucha por su manifestación y los sentidos de la misma. En ese contexto preguntarse por la posibilidad de la memoria en medio de una situación de conflicto general y de excepcionalidades regionales, implica preguntarse por su posibilidad y por el sentido que la memoria tiene para las víctimas y la sociedad en espacios públicos como privados.