El campo social de las organizaciones juveniles del Departamento del Atlántico está integrado principalmente por organizaciones articuladas a instituciones tradicionales. Pero sus miembros se muestran resistentes hacia el ejercicio tradicional de ciudadanía debido los imaginarios de desconfianza hacia el funcionamiento confiable del Estado y sus formas establecidas de participación ciudadana. Adicionalmente, esta resistencia está acompañada por indicios de sujetos sociales y ciudadanías alternativas. Sin embargo, existen dificultades para definir este campo social debido a la poca institucionalización de relaciones externas entre organizaciones juveniles, porque podría ser más acertado hablar de los campos sociales a los cuales pertenecen