Con el fin de otorgar herramientas jurídicas modernas y eficaces para la protección de los derechos de los consumidores en general1, fue promulgado el nuevo Estatuto de Protección al Consumidor, Ley 1480 de 2011, sancionada el 12 de octubre de ese mismo año, y la cual entró en vigencia el 12 de abril del 2012. Si bien se consagra un sistema general de protección a los consumidores, contiene también una serie de normas que, unas veces de forma directa, y otras de manera indirecta, impactan en la operación de las compañías aseguradoras.