El paciente oncológico necesita disponer de un acceso venoso seguro para la administración de tratamientos endovenosos sin interrupción; el catéter central con reservorio subcutáneo es un dispositivo de uso común en oncología que se inserta por técnica quirúrgica y evita la multipunción y efectos locales de los medicamentos en los pacientes. La permeabilización del catéter con reservorio representa uno de los principales cuidados de enfermería; las técnicas varían según las instituciones y casas productoras, no hay claridad en la periodicidad y cantidad de medicamento que se debe usar para lograr una adecuada permeabilización y evitar su obstrucción; por esto se realizó una revisión documental, de estudios de investigación publicados en inglés, español y portugués, del año 2000 al 2011, sobre técnicas de permeabilización y evaluación de su efectividad. Los hallazgos muestran que la permeabilización del catéter central con reservorio subcutáneo tiene varios objetivos, de prevención que se realiza después de cada uso, de mantenimiento en un periodo de tiempo entre 4 y 12 semanas y en el manejo de la obstrucción. Y de acuerdo a lo analizado se encontró que la heparina sódica es la sustancia de elección en el manejo preventivo de la obstrucción en el catéter con reservorio subcutáneo, usando una concentración de 100UI/ml con un volumen a introducir en el puerto que varía de 10 a 5 ml; en casos de obstrucción se utilizan sustancias con poder fibrinolítico, la urokinasa resulto ser la sustancia más usada, seguido se encuentra la estreptoquinasa y el activador tisular del plasminógeno.