En la actualidad, la mayoría de las empresas conocidas como Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme) están en constante evolución. Por ello requieren de diferentes dinámicas para que la gestión de sus procesos permita optimizar los recursos, con el fin de lograr una mejor posición en el mercado y obtener un crecimiento sostenible en la industria. La implementación de los Sistemas de Control de Gestión (SCG) al interior de las empresas surge con el fin de ejecutar las estrategias necesarias para alcanzar sus objetivos. Para hacer un mejor acercamiento a los efectos de los SCG, se realizó una revisión de literatura con el fin de determinar la incidencia de tres factores importantes: la cultura organizacional, la innovación y el rendimiento. Se encontró que los autores coinciden en que los SCG son esenciales en el desarrollo de la misión de las empresas y, que en dicho crecimiento, a su vez, es preciso tener cuenta desde los valores, las conductas y las mejoras en los proceso hasta los resultados como insumo para una mejor toma de decisiones.