La exploración tanto compositiva como interpretativa que se ha emprendido en este proyecto de creación artístico, busca en un principio, propiciar un dialogo entre el campo y la ciudad: remitiéndose a fuentes creativas pertenecientes a la tradición del Bullerengue y sus ritmos compartidos oralmente (Fandango de lengua, Bullerengue sentao, Chalupa) la sonoridad del Porro Palitiao de banda. La textura sonora del Avant-Garde en el Jazz (como referencia a esta última, cabe mencionar la influencia de la escena musical Bogotana, la cual ha marcado profundamente las intenciones artísticas y políticas) siendo a su vez un abanico de posibilidades interpretativas e imaginarios que encuentran un equilibrio por medio del ejercicio compositivo. Desarrollado a través de un formato no convencional dentro de las músicas populares (batería, guitarra eléctrica, tuba y síntesis).