En Colombia la enseñanza del inglés se ha articulado a una política pública denominada “Plan Nacional de Bilingüismo”. En esta se establece el objetivo de “lograr ciudadanos y ciudadanas capaces de comunicarse en inglés, de tal forma que puedan insertar al país en los procesos de comunicación universal, en la economía global y en la apertura cultural, con estándares internacionalmente comparables”, razón por la cual los medios de comunicación se han enfocado en impulsar su aprendizaje hasta el punto en que han terminado por ser presentarlo como sinónimo de bilingüismo y de modernidad, y por tanto, como una necesidad básica para desarrollar la vida. Esta visión, entonces, falla en reconocer la multiculturalidad y la plurietnicidad del país, excluyendo las necesidades lingüísticas básicas de poblaciones indígenas y marginales en las ciudades capitales, siendo estas justamente las acogidas por el instituto de Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA, institución que en los últimos año ha decidido empezar a impartir la enseñanza del inglés a sus estudiantes.